El conjunto de medidas aprobadas por el Consejo de Ministros en el día de hoy en materia económica y comercial va a suponer un duro golpe para el pequeño y mediano comercio español, que vive actualmente uno de los peores momentos de su historia.
Desde la CEC, se considera que estas medidas de liberalización de los
horarios comerciales y de las rebajas están diseñadas para satisfacer
las demandas de las grandes superficies en España, suponiendo el
mayor cambio normativo realizado en el sector de la distribución
comercial en toda su historia de una sola vez y dibujando un
panorama desolador para el pequeño y mediano comercio.
“El sector de la distribución comercial es uno de los más perjudicados
por las medidas aprobadas hoy por el Gobierno. Mucho nos tememos
que éste nuevo escenario provocará una escalada del cierre de
establecimientos y la desaparición del tejido comercial de proximidad,
que quedará en el recuerdo de aquellos que apostamos por la calidad,
el trato cercano y la sostenibilidad de las ciudades.”, señala Manuel
García-Izquierdo, presidente de la Confederación Española de
Comercio (CEC).
Desde la Confederación consideramos ilógico una subida del IVA bajo
las circunstancias actuales de contracción del consumo. En opinión
del presidente de la CEC, “El aumento de la presión fiscal influirá
gravemente sobre el consumo al reducir drásticamente el poder
adquisitivo de los ciudadanos y las oportunidades de viabilidad del
pequeño y mediano comercio. Teniendo en cuenta que la mayor parte
de productos relacionados con el comercio se gravarán al tipo general
del 21%, si a esto le añadimos la ampliación del número de horas de
apertura comercial, los costes generados no serán asumibles por los
comerciantes cuyos márgenes comerciales, después de un importante
descenso de las ventas y a estas alturas de la crisis, son
prácticamente nulos. Desde el sector creemos que irremediablemente
subirán los precios de los productos afectando directamente a los
consumidores”.
García-Izquierdo insiste en afirmar que “el pequeño y mediano
comercio ha tocado fondo, por lo que no entendemos que el Gobierno
no apueste por un verdadero plan de dinamización del comercio que
permita una reactivación del sector y, sin embargo, se decante por
este tipo de medidas que lo único que hacen es agravar la situación.
Además, creemos que no resulta coherente que por un lado se
pretenda fomentar el espíritu emprendedor, característico del sector
comercial y, por otro, se ejecuten este tipo de medidas que
desincentivan el autoempleo, con jornadas más amplias, mayor carga
fiscal y costes laborales y económicos más elevados.”
Desde la Confederación creemos que el sector ha realizado un
enorme esfuerzo en el mantenimiento del empleo y en la reducción
de los márgenes comerciales para adaptarse a las circunstancias
económicas y poder ser competitivos– apunta García-Izquierdo- y,
aunque muchos establecimientos se han visto abocados al cierre, su
capacidad de resistencia es heroica si observamos la situación a la
que tienen que hacer frente día a día.
La CEC, se posiciona en contra de la liberalización de las
rebajas
Con referencia a la liberalización de las rebajas y promociones
planteada hoy por el Gobierno, la CEC muestra su sorpresa al mismo
tiempo que manifiesta su rotundo rechazo a la eliminación de
concepto de rebajas, por entender que resulta necesario seguir
manteniendo periodos de rebajas comunes para todos los
comerciantes, que tanto atractivo comercial tienen para los
consumidores. “Nuestra organización no ha podido trasladar su punto
de vista sobre esta cuestión, que es de vital importancia para nuestro
sector. Desde que hace 60 años se implantaran, las rebajas
constituyen un atractivo comercial para los consumidores y máxime
en estos momentos de fuerte contención del consumo, cuya
eliminación tendría gravísimas consecuencias para la recuperación
económica del país. Hay que tener en cuenta además que,
prácticamente en todos los países europeos sigue existiendo un
periodo de rebajas concreto y común para todos los comerciantes, y
por tanto, solo se puede entender que esta medida se plantea con la
clara intención de satisfacer los intereses de las grandes empresas de
la distribución.”, argumenta García-Izquierdo.
No obstante, la CEC confía en que, a partir del próximo lunes, una
vez se conozca el texto normativo definitivo, se pueda iniciar un
proceso de diálogo con el Gobierno a fin de reconducir y rectificar las
medidas adoptadas en materia comercial y seguir defendiendo un
modelo comercial equilibrado donde puedan convivir todos los
formatos comerciales, apostando definitivamente por la urgente
ejecución de un plan de dinamización del sector con medidas
realmente efectivas.
CEC (Confederación Española de Comercio) 13/07/2012