20/04/2012 – La Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados (ACES) ha apostado por una normativa comercial «más homogénea» y una reducción de cargas administrativas «innecesarias», al tiempo que ha mostrado su oposición a una eventual subida del IVA recordando que el incremento aplicado en 2010 no tuvo un «efecto beneficioso».
ACES, que representa a Carrefour, Dia, Eroski, Lidl, Supercor y Sabeco, ha celebrado este jueves su jornada anual, donde el presidente de la asociación, Ignacio Cobo, ha apostado por que las reformas que se están acometiendo en España sean «ambiciosas» en todos los ámbitos, especialmente en el laboral.
«Confiamos en que la tramitación parlamentaria sirva para mejorar algo más el marco jurídico en asuntos como la contratación a tiempo parcial o la negociación colectiva. Así, nuestras empresas podrán seguir creando cada vez más y mejor empleo», destacó.
Sobre la negociación colectiva, ACES considera necesario que en la tramitación de la Ley se introduzcan nuevos elementos que permitan que los empresarios libremente asociados y los representantes de los trabajadores definan su propio marco de negociación.
Cobo subrayó que «hay que abandonar definitivamente las estructuras rígidas de convenios que restan competitividad y dinamismo a los sectores y las empresas».
«Asociaciones como la nuestra, cuyos establecimientos emplean directamente a más de 80.000 personas en más de 2.700 municipios, deben tener capacidad para decidir libremente su modelo de relaciones laborales», señaló.
El presidente de ACES reclamó también «un cambio en la normativa que reduzca las cargas administrativas innecesarias en defensa de la libertad de las empresas para definir sus formatos y modelos de negocio».
Según explicó, las cadenas de supermercados de ámbito nacional padecen la multiplicidad de normativas que rigen la actividad comercial. Cobo remarcó que «la atribución de competencias exclusivas a las comunidades autónomas no ha tenido en cuenta el crecimiento de un modelo comercial basado en operadores globales».
Otro tema que preocupa a las empresas del sector son los impuestos que gravan el consumo. Al respecto, ACES recalcó que en la experiencia reciente el incremento del IVA no ha tenido un «efecto beneficioso, por su repercusión en la contracción del consumo y su escaso impacto recaudatorio», y reclamó medidas que faciliten el crédito y devuelvan la confianza al consumidor.
Fuente: Franquicias Hoy