Emprendemanía.com 17/01/2012 – Las grandes superficies destrozan al comercio tradicional minorista de cualquier ciudad, sobre todo aquellas que están dentro de los núcleos urbanos, en casi todos los casos es bastante complicado competir con dicho gigante, pero hay estrategias para con un pequeño comercio moderno resistir la competencia de las grandes superficies.
Entre las muchas estrategias que se pueden seguir en el contexto actual las más importantes son:
Especialización en calidad
Se obtiene una ventaja competitiva frente a las grandes superficies ofreciendo un producto o servicio de alta calidad que se convierta en un punto de referencia para quienes estén dispuestos a pagar más por obtener mayor calidad
Fidelización
Entendida como:
1.Trato personalizado: en una gran superficie la atención a la clientela es un factor crítico, porque son muchos y no se les puede dedicar tanta atención como en un pequeño comercio. Un trato que refuerce la confianza servirá para atraer clientela y retenerla.
2. Facilidades de pago: admitir tarjetas de crédito, o vales de empresa en el caso de los restaurantes, mejora la imagen que damos ante la clientela y permite ofrecer los mismos servicios que los grandes competidores.
3. Servicios añadidos: tarjetas de descuento por volumen de compra, garantías, entregas a domicilio, devolución del dinero si el cliente no queda satisfecho, etc. Son servicios que exigen un esfuerzo a las personas emprendedoras en recursos y tiempo, pero proyectan una sensación de seriedad y transparencia.
4.Imagen: la primera impresión es crucial. El atractivo del local, una buena disposición y presentación de los productos, la limpieza e higiene, o la indumentaria del personal que atiende al público transmiten un mensaje de modernidad y atención por el detalle superior a la que se puede percibir en una gran superficie.
Mejorar las compras y logística
Utilizando herramientas como:
1.Centrales de Compra: permiten a los comerciantes reducir costes y mejorar las condiciones de compra al obtener mejores precios de las empresas proveedoras, fijados para los pedidos de grandes cantidades de mercancía. De esta manera, el pequeño empresariado puede ofrecer precios más competitivos a su clientela en la línea de lo que ofrecen las grandes superficies
2.Plataformas de distribución: ayudan a que grupos de pequeños empresarios y empresarias del comercio recorten de manera conjunta costes en transporte y distribución y que puedan disponer de instrumentos logísticos apropiados para garantizar un abastecimiento puntual.
Innovando continuamente
Esto es algo, diríamos que transversal a cualquier ámbito del mundo empresarial. Hay que estar en un proceso de cambio y de innovación, más si estamos hablando de comercio tradicional, donde cuanto antes cambien su ‘cultura’ mejor les irá.
No rendirse
Es lo último que queda, no perder el entusiasmo por luchar ante las grandes superficies.